2 de marzo de 2014

El Parque Urbano Kabah, ¿El Central Park cancunense?

Nací y crecí en una pequeña ciudad de Yucatán llamada Tekax, al sur de Mérida, en una casa de patio grande con árboles frutales, grandes ramones y huanos (palmas). 

Tal vez por esa razón me gustan los árboles. Mis hermanos y yo nos pasábamos todas la tardes jugando en ese gran patio, trepando a los árboles más altos y comiendo fruta con chile.
Mi momento favorito era subir a la copa más alta del ciruelo y asomarme por encima del mismo para ver el atardecer.

¿Qué tiene que ver con el parque Kabah? Para mi es esa conexión con los árboles de mi infancia desde que vivo en Cancún.


Me gusta caminar en los senderos (sac-be's) y escuchar el correr de la brisa entre las hojas de los árboles. Es muy relajante, pese que a lo lejos se escucha el ruido de los autos y el tráfico de Cancún.

Otras veces me gusta sentarme junto a la charca y escuchar a los pájaros cantar.

Venir a caminar al parque Kabah es un recordatorio de que hay vida afuera y más vale ¡disfrutarla!


Otras razones para venir al parque Kabah de Cancún, pueden ser las clases de Tai Chi, de dibujo, de ajedrez y otras actividades culturales que se imparten aquí en la semana y también los sábados y domingos.

Aunque me encanta este parque, creo que podría ser más como el Central Park de Nueva York, definitivamente más gente vendría. Ojalá lo sigamos conservando.


¡Hasta la próxima caminata!


1 de marzo de 2014

Atardeceres en Puerto Morelos ¡Un relajante placer!

¡Puerto Morelos me encanta! Escaparme un sábado por la tarde a disfrutar el atardecer, ¡No tiene precio!

Ver la gente pasar, escuchar la risa de los niños al jugar, sentir el tibio sol sobre la piel, escuchar la brisa correr ¡Un regalo a los sentidos!

La caminata vespertina tampoco puede faltar y por supuesto, un buen libro para terminar.




26 de diciembre de 2013

El que quiera azul celeste, que vaya a Valladolid

El cenote Zaci (se pronuncia Zakí) y los cenotes X-kekén (la X se pronuncia "ish") Samulá son visitas obligadas cuando estás en Valladolid, Yucatán, además el calor de la zona sin duda te motivará a refrescante en sus aguas cristalinas.

El cenote Zaci, es un cenote a cielo abierto de un color azul oscuro y se ubica dentro de la ciudad de Valladolid, en el patio trasero de un restaurante del mismo nombre. Sin embargo puedes entrar nada más al cenote sin tener que consumir en el restaurante.

La entrada cuesta $15 pesos adultos y $10 pesos los niños.




Los otros dos cenotes, X-kekén y Samulá se encuentran a 2 km de Valladolid en la carretera que va a Mérida por la libre.

Estos dos cenotes están en cavernas, hay que descender en unas angostas escalinatas unos 5 metros para poder llegar al borde del agua.

En la parte superior de los cenotes tienen unos agujeros que permiten la entrada de la luz solar, que logra unos efectos muy hermosos y hace parecer más brillante el azul del agua cristalina.

Es altamente recomendable nadar en sus aguas, son muy refrescantes, además en la caverna a pesar de la frescura del agua, la concentración de humedad hace que este caluroso el interior de la misma.

Si no eres bien nadador o si no fuise preparado, en la entrada a los cenotes hay tiendas de artesanías que rentan chalecos y toallas por $20 pesos.



A la salida te puedes tomar fotos con unos guerreros mayas bastante simpáticos.

Ambos lugares cuentan con baños y servicios.