21 de agosto de 2011

Ascendiendo la Pirámide del Sol en Teotihuacán, sueño realizado


A lo lejos se escucha el pitido de un tren, el sonido de una flauta, los silbatos en lo alto de la piramide y algunas notas de musica electrónica. Es una mezcla extraña y surrealista, mientras el viento frio golpea mi rostro. ¡Es fabuloso estar aqui!

Es hora de iniciar el ascenso. La piramide del Sol en la gran Teotihuacán espera imponente, retando a los valientes.Es un gran  reto, creo que es la piramide mas alta que he escalado. Pero en este ambiente de fiesta familiar, a nadie mas que a mi, importan los retos personales.
Hay una mezcla de nacionalidades, de creencias y de condiciones sociales, todos atraidos hasta aquí por diferentes razones, pero nadie puede negar que Teotihuacán es impresionante.
Trato de imaginar los tiempos de esplendor de esta ciudad, pero no logro ver todos los detalles.

Empecemos el ascenso, arriba podremos ver mucho mejor.
Uff! Solo he subido el primer tramo y ya siento el cansancio. Realmente será una promesa a los dioses de la antiguedad.
Muchos visitantes empiezan con el mismo entusiasmo que yo, ¡no puedo quedarme atrás!

Algunos suben corriendo, otros con paso firme pero pausado, yo aprovecho el pretexto de las fotos para tomar un respiro.
Unos a otros nos echamos porras para continuar el ascenso. Hacemos ver a los demás que somos fuertes y decididos.
La cima de la gran piramide del sol de la gran Teotihuacán, está a cada escalón mas cerca.
Las piedras labradas de las pirámides, ejercen cierta fascinacion en mí. Mientras las observo durante el ascenso, pienso en las manos que las trabajaron, las horas de trabajo dedicadas y me pregunto si alguna vez pensaron en el futuro de su obra.
Conforme llego al siguiente nivel, la escalinata se vuelve mas angosta y mas empinada, pero desde aquí, "la calzada de los muertos" ya se visualiza en toda su longitud.  Es impresionante la vista de todo el conjunto de edificaciones y aún me falta dos últimos tramos por subir.

A lo lejos la música electrónica me recuerda que han pasado muchos siglos desde la construcción de esta gran pirámide.

¡Por fin he llegado a la cima!, me tomo un momento para recuperar el aliento, mi condición fisica está a prueba. Un niño llama a su abuelita que sube detras de mí, !Que alivio que pude llegar antes que la abuelita!
Aquí arriba el viento es muy fuerte, casi pierdo mi gorra y el equilibrio. Todos nos sentimos intrépidos, ¡hemos llegado a la cima de la pirámide del Sol! Retamos al viento y queremos atrapar el momento con nuestras cámaras. ¡Es una gran experiencia!

Por lo pronto, que el Dios Sol nos ilumine y nos llene de energía, mientras recuperamos el aliento y nos deleitamos con la vista de todo el valle. Teotihuacán, está a nuestros pies.
Bueno, es hora del descenso y esa, es !otra historia!